El nuevo iPhone se retrasa por problemas con el lector de huellas dactilares.
Apple trata de encontrar un material de recubrimiento que no interfiera con el sensor, según varios medios
Apple está obligada a reaccionar tras haber sido superado con los últimos terminales de HTC y Samsung, ambos fabricantes de dos de los mejores teléfonos del alta gama del momento. Mientras, los rumores sobre un nuevo iPhone se suceden. El nuevo terminal que se presentaría este verano podría integrar un software encargado del reconocimiento de huellas dactilares del usuario, en sustitución del botón «Home» actual.
Sin embargo, esta integración podría ser el motivo del retraso de su lanzamiento, según fuentes de la cadena de suministro del nuevo terminal en Taiwán, que aseguran que la producción comenzará en junio. Los rumores sobre las características del nuevo iPhone de Apple no hacen más que crecer. El diario «The Telegraph» y la agencia Reuters anuncian que una de sus características, también barajadas antes de la presentación del iPhone 5, es un sensor de huellas dactilares que permita a los usuarios desbloquear el «smartphone» u otro tipo de opciones.
El teléfono, que los analistas lo denominan iPhone 5S, podría retrasarse por no encontrar una solución a esta función, ya que Apple trata de encontrar un material de recubrimiento que no interfiera con el sensor. Las probabilidades de la integración de este sistema surgieron a raíz de las declaraciones del analista de KGI Securities, Ming-Chi Kuo, quien aseguraba que el iPhone 5S «tendrá un chip de huellas dactilares en el botón de ‘Inicio’, la mejora de la seguridad y facilidad de uso».
El sistema contaría con un escáner dactilar con tecnología propia de la compañía AuthenTec, adquirida por Apple el pasado año, y que llevaría a cabo un reconocimiento de las huellas del usuario en el botón de inicio para activarse, tan sólo, con aquellas huellas recogidas previamente por el dueño del dispositivo.
Sin embargo, la instalación de este sistema podría haber acarreado algunos problemas a la compañía, encontrándose en este momento en busca de un material capaz de recubrir el dispositivo mientras que no interfiera en este sistema. La búsqueda de un material resistente capaz de no interferir en el reconocimiento dactilar puede estar llevando más tiempo del esperado a los de Cupertino, quienes habrían tenido que posponer la fecha de lanzamiento del terminal en varias ocasiones, según fuentes consultadas por el diario.
Además el nuevo terminal, Apple podría estar trabajando en su terminal «lowcost» con el mismo sistema de reconocimiento dactilar y, por tanto, con los mismos problemas a la hora de finalizar su desarrollo. Este dispositivo de bajo precio podría estar enfocado a los mercados en crecimiento como China e India. Según fuentes de proveedores en Japón, la producción en pequeña escala de las pantallas del terminal comenzará en mayo con un aumento gradual de la producción en junio.